#MauleNews: Contemplar el Estrecho de Magallanes, besar el pie del indígena en la Plaza Muñoz Gamero, recorrer y maravillarse con uno de los más bellos cementerios del país, disfrutar de la gastronomía de la zona y conocer la historia regional en importantes museos, es parte de lo que harán los profesores que ganen la XXIII Pasantía Cultural: La ciudad, un espacio educativo de Fundación Futuro, que será del 17 al 20 de enero de 2019.
La invitación la realiza la directora de la fundación, Magdalena Piñera, quien confiesa tener cuatro pasiones en el ámbito laboral: la educación, la ciudad, el arte y el patrimonio. En esos ejes ha desarrollado su trabajo en estos 25 años de la Fundación Futuro. Profesora de historia, lo suyo siempre ha sido invitar a los alumnos y profesores de Chile a salir de las cuatro paredes de la sala de clases para conocer y valorar la ciudad, cualquiera ella sea, como un gran espacio educativo. “¿Acaso las plazas, parques, museos, rincones, mercados y “personajes” citadinos no nos hablan de nuestra arquitectura, poesía, sociedad, economía cultura y gastronomía?”, recalca con fuerza.
Este programa, que comenzó en 2007 y en el cual ya han participado casi dos mil profesores, busca entregar herramientas a los docentes para saber cómo organizar de mejor manera las salidas pedagógicas, pero también para que las mismas materias que se pasan dentro de una sala de clases, puedan experimentarse fuera del establecimiento, generando con ello un mayor conocimiento del lugar donde se vive, apropiarse del entorno, crear identidad local y cuidar y querer su ciudad.
Para Paola Pavez, profesora de Historia del Liceo Técnico Profesional de Gastronomía y Hotelería de Santiago y quien realizó la pasantía el 2011 en Punta Arenas también, señaló: “Es una experiencia muy motivante, donde uno aprende a tomar la ciudad como una instancia de creación cultural. Además el viaje permite evidenciar lo que uno explica en la sala de clases cuando uno está viendo, por ejemplo, migraciones. Le recomiendo esta pasantía a todos los profesores, por lo que se vive y por lo que se aprende”.
La invitación la realiza la directora de la fundación, Magdalena Piñera, quien confiesa tener cuatro pasiones en el ámbito laboral: la educación, la ciudad, el arte y el patrimonio. En esos ejes ha desarrollado su trabajo en estos 25 años de la Fundación Futuro. Profesora de historia, lo suyo siempre ha sido invitar a los alumnos y profesores de Chile a salir de las cuatro paredes de la sala de clases para conocer y valorar la ciudad, cualquiera ella sea, como un gran espacio educativo. “¿Acaso las plazas, parques, museos, rincones, mercados y “personajes” citadinos no nos hablan de nuestra arquitectura, poesía, sociedad, economía cultura y gastronomía?”, recalca con fuerza.
Este programa, que comenzó en 2007 y en el cual ya han participado casi dos mil profesores, busca entregar herramientas a los docentes para saber cómo organizar de mejor manera las salidas pedagógicas, pero también para que las mismas materias que se pasan dentro de una sala de clases, puedan experimentarse fuera del establecimiento, generando con ello un mayor conocimiento del lugar donde se vive, apropiarse del entorno, crear identidad local y cuidar y querer su ciudad.
Para Paola Pavez, profesora de Historia del Liceo Técnico Profesional de Gastronomía y Hotelería de Santiago y quien realizó la pasantía el 2011 en Punta Arenas también, señaló: “Es una experiencia muy motivante, donde uno aprende a tomar la ciudad como una instancia de creación cultural. Además el viaje permite evidenciar lo que uno explica en la sala de clases cuando uno está viendo, por ejemplo, migraciones. Le recomiendo esta pasantía a todos los profesores, por lo que se vive y por lo que se aprende”.
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